Los cajeros automáticos europeos se ven expuestos a una nueva amenaza
Los bancos europeos están viéndose amenazados por un innovador nuevo ataque contra sus cajeros automáticos. En él, los delincuentes colocan dispositivos especiales en las máquinas expendedoras de efectivo para grabar la información de las tarjetas de pago.
Muchos bancos de Europa han equipado sus cajeros con dispositivos diseñados para impedir que los estafadores puedan colocar sus artilugios. Pero parece que en algunos casos, los delincuentes han conseguido quitar tales dispositivos y después modificarlos para llevar a cabo su objetivo con éxito, según un reciente informe de la organización European ATM Security Team (EAST), que recopila datos sobre el fraude realizado en los cajeros de toda Europa.
Los aparatos de los delincuentes capturan los detalles grabados en las bandas magnéticas que se encuentran en la parte trasera de las tarjetas bancarias y después los trasladan a una nueva tarjeta. A menudo capturan también el número de identificación personal (PIN) de la víctima utilizando para ello una microcámara que instalan también en el cajero automático.
Son ya cinco los países en los que algunos bancos han informado de haber descubierto en sus máquinas alguno de estos nuevos dispositivos, que utilizan un reproductor MP3 alterado para grabar la información.
EAST no ha revelado el nombre de los bancos afectados por estos fraudes ni de los países donde se han producido. Pero se sabe que afecta algún país con más de 40.000 cajeros desplegados. Con éste dato, las posibilidades se reducen a cinco: España, Francia, Alemania, Rusia y Reino Unido.
En cualquier caso, la instalación de software malicioso en los cajeros constituye una manera más sofisticada de ejecutar fraude que los dispositivos físicos. Sólo uno de los cinco países mencionados ha sido objeto de algún ataque de este estilo, que fue detectado por primera vez en Europa del Este, en el año 2007.
