Las redes sociales necesitan políticas de seguridad corporativas
Las redes sociales, como Twitter o Facebook, abren la puerta a nuevas amenazas para los datos corporativos. Por ello, las empresas necesitan protegerse adoptando políticas de seguridad.
El problema es que los empleados, incluso sin malas intenciones, pueden filtrar inadvertidamente información sensible en este tipo de redes, porque suele darse por supuesto que en ellas todo el mundo es quien dice ser.
Por eso, Rothke recomienda a las empresas que desarrollen estrategias específicas para las redes sociales y que las comuniquen detalladamente a los empleados para satisfacer los objetivos de sus negocios. Así, por ejemplo, los Marines de Estados Unidos, prohíben el uso de Facebook, algo que podría no ser aconsejable en el caso de una firma de relaciones públicas.
Las estrategias más adecuadas dependen pues de cada caso, y pueden variar desde un completo bloqueo del uso de las redes sociales, hasta una limitación del mismo o el permiso para su utilización prácticamente indiscriminada.