Crece la falsificación de 'nombres de dominio' en tiendas electrónicas
La Oficina de Propiedad Intelectual de la UE (EUIPO) descubre que el 81% de las tiendas electrónicas vulneran marcas de otras entidades utilizando un nombre de dominio que ya ha sido utilizado previamente por otra entidad.
Una reciente investigación desvela que crecen las tiendas electrónicas presuntamente falsas que utilizan nombres de domino previamente registrados. Solo entre los meses de diciembre de 2016 y enero de 2017, se estima que 21.000 tiendas electrónicas de cuatro Estados miembros de la Unión Europea pudieron comercializar productos que infringen derechos de marca.
Los nombres de dominio utilizados incluyen ejemplos de casi todas las áreas de actividad de Internet, incluyendo actividades públicas, privadas y comerciales, organizaciones públicas y de interés especial, así como sitios web de noticias y medios. También se extiende a personajes famosos, club de fans, y sitios web para adultos.
El informe, publicado por la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO), demuestra que de las 27.000 tiendas mencionadas, más de 21.000 usaron nombres de dominio previamente registrados por otros usuarios.
El director ejecutivo de la EUIPO, Antonio Campinos, señala que “este tipo de análisis e informes ayudan a las autoridades pertinentes de la UE a reflexionar sobre cómo abordar el problema de las tiendas electrónicas falsas”. Actualmente, la oficina EUIPO es una agencia descentralizada de la UE con sede en Alicante, la cual se encarga de gestionar el registro de la marca de la Unión Europea (MUE) y el dibujo y modelo comunitario registrado (DMC) que proporcionan protección de la propiedad industrial en los 28 Estados miembro.
La Agencia también ha elaborado informes en los que dibuja las rutas internacionales del comercio mundial de productos falsificados, destacando que los contrabandistas de productos de este tipo utilizan Hong Kong, Los Emiratos Árabes Unidos y Singapur como principales centros del comercio mundial, importando cargamentos de contenedores llenos de productos falsificados que luego son enviados por correo postal o servicio de mensajería.
Esta investigación ahonda en la necesidad de involucrar al mayor número posible de autoridades para cooperar en la lucha contra este tipo de abusos, que sin duda, vulneran los derechos de propiedad intelectual de las personas.
