"Hay que hacer una OPA hostil al ciberespacio"

La confianza digital tiene que abrirse hueco en un entorno “enemigo”. Así es como definió María del Mar López Gil, jefa de la Unidad de Ciberseguridad y lucha contra la Desinformación del Departamento de Seguridad Nacional (DSN), al ciberespacio. Lo hizo en el marco del evento Ciberseguridad 2020: desarrollando la confianza digital,  al que acudieron más de 300 profesionales de la industria ayer en Madrid. “El ciberespacio es complejo, global y libre de fronteras”, dijo. Allí se libran las batallas de la actualidad; el terrorismo, la guerra o el espionaje, a los que ponemos el prefijo ‘ciber’. En la infinitud de sus redes los ‘malos’ desarrollan su actividad aprovechando que, en el mundo digital, cada vez estamos más conectados y, por lo tanto, expuestos a más riesgos. Prueba de ello es el ataque conocido como ransomware que, solo en España, ha tumbado en las últimas fechas los sistemas informáticos de reputadas organizaciones como Everis, Prosegur, Cadena Ser o el Hospital de Torrejón de Ardoz. Es más, tan importante es la actividad que se desarrolla en Internet que el Fondo Monetario Internacional (FMI) ya ha catalogado la ciberdelincuencia como un problema de primer orden político. En 2019, las pérdidas relacionadas con este segmento fueron de más de dos billones de dólares, superando el PIB de países europeos como Italia. Por ello, subrayó López, en referencia de nuevo al ciberespacio, “hay que hacerle una OPA hostil”.

La receta para poner freno a este fenómeno y generar confianza pasa por la cooperación y la corresponsabilidad entre empresas, ciudadanos y administraciones públicas. “La economía digital no funciona sin esta base”, arguyó la directiva. “Tenemos que construir un ecosistema de credibilidad entre todos. España forma un equipo muy bueno”.

El estado del ciberespacio se ve constantemente acelerado por la explosión de nuevas tecnologías como la nube, la inteligencia artificial o el 5G, que va a amplificar la velocidad de las conexiones. Estas son armas de defensa, pero los ciberdelincuentes, que forman una industria muy engrasada, también se valen de ellas para pasar desapercibidos y robar cantidades ingentes de dinero y datos, que ahora mismo son, según palabras de López, “la gasolina de la que se alimenta el ciberespacio”.

El papel de España en el tablero digital

En su discurso, la experta incidió en la posición y madurez de España en el tablero geopolítico digital. “Deberíamos sacar pecho por el desarrollo que hacemos en materia ‘ciber”, expresó. “Tenemos que aprovechar nuestro papel en el contexto internacional”. Hacerse fuerte en este aspecto significa apostar por el liderazgo digital, continuar con la concienciación y potenciar el análisis y la gestión del riesgo. “Los ‘malos’ no pueden quedar impunes. Tenemos que recorrer un camino común para dotarnos de capacidades de disuasión. En esto, invertir es necesario. Busquemos un enfoque proactivo de la ciberseguridad”, concluyó.